Jakobsen renace en la Vuelta y se impone al sprint en Molina de Aragón

El segundo sprint de la Vuelta a España deparó una de las victorias más emotivas de lo que va de temporada. Fabio Jakobsen volvió a triunfar en una Gran Vuelta en la meta de Molina de Aragón sumando su tercer parcial en la ronda española, el primero tras su fatal accidente en el que pudo perder la vida. El velocista holandés superó a Demare y Cort Nielsen en una llegada apretada pero en la que impuso su punta ante otros sprinters.

Día tranquilo para los hombres de la general pero no para el –eventual– líder Rein Taaramae. El estonio de Intermarché Wanty Gobert se fue al suelo faltando dos kilómetros para el final de la etapa y acabó llegando a meta dolido, aunque en tiempo para mantener el maillot rojo.

Después de la subida al Picón Blanco, los capos de la carrera volvían a envainar las espadas ante una etapa llana que partía de Burgo de Osma y cuya llegada, aunque con cierta empinación en Molina de Aragón, no suponía un escenario propicio para marcar diferencias.

Por tanto, y pese a que los Movistar, Jumbo o Ineos formaron parte de las zonas cabeceras de la etapa en todo momento, para proteger a sus líderes, no incidieron en la captura de una fuga minoritaria que no puso en peligro en ningún momento la llegada al sprint. Tampoco el viento, que no hizo acto de presencia de manera exagerada para propiciar abanicos, supuso un escollo en la etapa.

El sprint por ende estaba asegurado y el treno de FDJ, después del cero de Demare en la primera volata de la Vuelta, tomó el mando con Guarnieri marcando el ritmo en pos de una victoria de su compañero. Las hostilidades continuaron también por parte de Alpecin pero finalmente sería Jakobsen el que adelantaría por la izquierda a Philipsen, Cort Nielsen y el propio Demare, para hacerse con un triunfo parcial que tiene doble sabor a victoria después del accidente sufrido hace un año y que bien pudo acabar con su vida.